Fiestas de Bilbao 2022 / Negracalavera: En el infierno de los 27 grados del Bilborock
CAL: *
Martes 23 de agosto de 2022, Bilbao, Bilborock, 21 h, entrada libre.
El quinteto de alta energía participó en la 35º Muestra de Rock Local, que fue un infierno rojo por culpa de la limitación de temperatura del decreto de ahorro energético sanchista.
***
Hacía un calor horrible el martes a las 9 en el Bilborock (la antigua iglesia de La Merced), adonde acudí para ver a Negracalavera dentro de la 35º Muestra de Rock Local, en la cual durante ocho días (de sábado a sábado de la Semana Grande) actuaron 18 grupos, 7 de ellos con componentes femeninos, como destaca el ayuntamiento. Con entrada libre, el primer grupo salía a las 8 de la tarde y el segundo a las 9. Aquí les contamos el bolo de los energéticos y macarriles Negracalavera, quinteto bilbaíno compuesto por Bugatti, Rosca, Fiz, Pintxo y Tobal (este es el apellido del baterista, el único que no presume de apodo), que tocaron después de Enrockecidos, a los que no pude ver por los toros.
El ayuntamiento cumple la ley sanchista y no pone el aire acondicionado a menos de 27 grados en todos los equipamientos municipales, así que el Bilborock, que rozó el lleno, era un horno este martes. Nada más entrar el calor húmedo me arropó como una manta mojada e hirviente. Este calor perjudicó a los ‘negracas’, como se motejan también ellos, que dieron un bolo en U, con un aplatanamiento durante el ecuador, un bolo de 13 canciones en 54 minutos con guitarras también ardientes, movilidad escénica y el foco en su cantante y líder, Txemi Bugatti, que hablando un poco como el humorista Flo dijo un par de veces: «esta es mi puta banda, mi puta vida, mi puto rock and roll». Ya vale de decir puto, joder, Txemi.
Como siempre ha sucedido en la historia de esta banda, el volcán que generan los músicos, que abarcó el martes desde el rock austral hasta las esquirlas tipo Stooges, se sitúa por encima de la voz de Txemi, quien no desmerece pero se las pasa canutas para aguantar el tirón eléctrico. La cita arrancó bien, con macarrismo escuela La Banda Trapera del Río (‘Espérame en el coche’, el desbordamiento de high energy en ‘Navajazos’), híbridos entre los Hellacopters y Motörhead (‘¿Quién sigue al idiota?’) o rock and roll en la estela de Dregen y Michael Monroe (‘Dios te odia’).
Los comentarios presuntuosos de Txemi, en plan roquero noruego tipo Turbonegro o Gluecifer («bienvenidos a esta iglesia, somos lo más parecido que vais a ver a Dios», dijo en su primera parrafada, a la que he quitados varios putos y frases), se aplacaron entre la séptima y la novena canción («qué calor hace aquí arriba, ya podríais soplar con dos cojones y con dos ovarios», pidió un sofocado Txemi, que parecía sufrir un flato), y sus dos títulos de perfil más bajo fueron ‘Saltar del tren’ y ‘Hasta la muerte’.
Pero menos mal que en el último tercio sacaron fuerzas de flaqueza y dejaron el pabellón bien alto con alta energía de Detroit (‘¡Qué miseria!’, cuando entre el fuego de la temperatura y las luces rojas eso más que un horno parecía un infierno), la veloz trepidación de los donostiarras Señor No (‘Atraco a las 12:00’) o el adiós con su guapa versión del ‘Lágrimas’ de los vitorianos Obligaciones, cuando Txemi bajó del escenario para repartir abrazos, besos y toquecitos en el hombro a la parroquia, un Txemi que al acabar el bolo se colocó en la puerta de salida, como si fuese un pastor de almas americano al final del culto dominical, para saludar a cada acólito de su rock and roll y decirle que le quiere. Y cuando pasó este plumilla recibió un abrazo del cantante, quien tenía la camiseta tan mojada de sudor y tan caliente como la manta imaginaria del principio.
ÓSCAR CUBILLO
Setlist Bilbao
* 1. Espérame en el coche
* 2. ¿Quién sigue al idiota?
* 3. Navajazos
* 4. Ven policía, ven
o 5. Alcohol
* 6. Dios te odia
7. Saltar del tren
o 8. Estrellas
9. Hasta la muerte
* 10. ¡Qué miseria!
* 11. Atraco a las 12:00
o 12. En el punto de encuentro
* 13. Lágrimas (Obligaciones)
bilbaoenvivo 
Agradabilisimo que te abrace alguien sudao en verano.Nunca he pasado más calor en el Arriaga que el lunes pasado con Sold out técnico (950 de 1000 de aforo)y el aire a 27°.
Las señoras parecían salmones fuera del agua,boqueando por oxígeno.